Con la victoria de los Dodgers en el cuarto encuentro de la Serie Mundial por 6-2 ante los Astros de Houston, la novena de Los Angeles aseguró que el campeonato de las Grandes Ligas se defina en su estadio.
La serie está empatada 2-2 por lo que por lo menos habrá un encuentro en Dodger Stadium. El sexto juego del clásico de otoño se llevará a cabo el martes 31 de octubre en tierras californianas.
Jugar en casa siempre representa una ventaja, sin embargo, en la Serie Mundial ha sido algo muy engañoso, ya que desde 2005, la última vez que los Astros estuvieron peleando por el campeonato, seis equipos han perdido el título frente a sus aficionados.
El año pasado sirve como un ejemplo muy claro, ya que los Chicago Cubs se recuperaron de una desventaja de 1-3 ante los Cleveland Indians y ganaron tres juegos consecutivos, incluyendo los dos últimos en el Progressive Field.
Pero no todo es malo para los Dodgers, ya que desde que se mudaron de Brooklyn a Los Angeles, la novena ha estado nueves veces en la Serie Mundial y sólo han perdido en una ocasión como locales (1978, en seis juegos ante los Yankees).
Sus dos últimos títulos fueron en 1991 y 1998, pero tuvieron que celebrarlo en patio ajeno (Nueva York y Oakland, respectivamente), por lo que el conjunto dirigido por Dave Roberts busca coronarse por segunda ocasión en su historia en Los Angeles. La primera vez fue en 1963 cuando de la mano del legendario Sandy Koufax barrieron a los Yankees.
¿Podrán los Dodgers por fin coronarse en casa o seguirán sorprendiendo los equipos visitantes?
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