LAC DE PAYOLLE, Francia.- Si en la Eurocopa de naciones botaron a Inglaterra a las primeras de cambio, por una carismática Islandia, parece que los ingleses vienen por una revancha continental, pues el inglés Steve Cummings ganó el viernes la primera etapa del Tour de Francia en los Pirineos, con un ataque en solitario en el puerto de montaña Col d’Aspin.
El Tour de Francia es como el mundial del futbol pero… para hombres de hierro, es, un recorrido que nació hace más de 100 años, dejando claro que al margen de los problemas, es el espíritu humano el gran vencedor.
Greg Van Avermaet conservó el sueter amarillo de líder general que consiguió hace dos días, mientras que el colombiano Nairo Quintana y Chris Froome arribaron con el pelotón en la séptima etapa, primera prueba de montaña.
Si bien las etapas anteriores son importantes, todos sabemos que la tour es montaña, sufrimiento y escalada.
Quintana y Froome, los dos favoritos al título, fueron retrasados cuando se ponchó un arco inflable que marcaba el último kilómetro de la ruta y cayó al suelo. Los ciclistas tuvieron que levantar el arco de la carretera y pasar por debajo con sus bicicletas.
Cummings, compañero de Mark Cavendish en el equipo Team Dimension Data, también ganó una etapa en el Tour del año pasado. Tres de las primeras etapas han sido ganadas en photo finish que favoreció a Cavendish, lo que ubica al inglés como el segundo mayor ganador de etapas en la tour pero más importante. Le da credibilidad, lo convierte en un veterano ganador, en un auténtico guerrero.
Cummings cronometró 3 horas, 51 minutos, 58 segundos en el recorrido de 162.5 kilómetros entre Jourdain y Lac de Payolle. El sudafricano Daryl Impey arribó segundo, a 1:05, y el español Daniel Navarro tercero con el mismo tiempo.
Froome cruzó la meta 11ro y Quintana 18vo, ambos a 4:29. El argentino Eduardo Sepúlveda llegó 27mo y los colombianos Sergio Henao y Jarlinson Pantano arribaron 32do y 38vo, respectivamente, todos con el pelotón.
Quintana trepó un puesto en la clasificación general y ahora marcha sexto, un lugar debajo de Froome, ambos a 6:42 de Van Avermaet.
La octava etapa del sábado es un recorrido de 184 kilómetros entre Pau y Bagnares-de-Luchon.
La tour es un ejercicio de sufrimiento, de combatividad, porque el sueter de líder no es para el más rápido, es para el que menos se queja. Nos quedan dos días de montaña a1, luego sprint, y después… lo que separa a los hombres de los niños, a3.
La tour sigue rodando.
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AO
