Un coleccionista demandó a Eli Manning y a los Gigantes de Nueva York por alterar jerseys, cascos y otras piezas de equipamiento para venderlas como si hubieran sido utilizadas en un partido.
Supuestamente Manning habría enviado un correo electrónico en el 2010 al gerente de equipamiento de los Giants pidiéndole “dos cascos que puedan pasar como utilizados en juegos”, según los documentos presentados el martes en la corte superior del condado Bergen en New Jersey.
El mariscal de campo de los Gigantes asegura que no hizo nada malo y que no tiene nada que esconder.
El dos veces Jugador Más Valioso del Super Bowl MVP habló el día de hoy en conferencia de prensa, en donde se rehusó a tocar el tema, ya que la demanda aún está pendiente. El juicio del caso está programado para el mes de septiembre.
Otro jugador de los Gigantes involucrado en este tipo de problemas es el corredor Brandon Jacobs, quien cree que tiene colgado en su casa un jersey distinto al que utilizó durante Super Bowl XLII.
Sus sospechas comenzaron cuando un coleccionista lo contactó vía correo electrónico diciéndole que poseía todo el equipo que usó durante ese partido incluyendo casco, jersey, pantalones, etc. En el mismo correo indica que toda la indumentaria se la compraron a uno de los utileros del equipo.
Lo que hace muy probable dicha situación, es que el coleccionista le mando fotos del uniforme a Jacobs, y en estas se pueden apreciar manchas que coinciden con las fotografías tomadas durante el juego.
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