El primer Masters 1000 ha estado lleno de sorpresas y un tenis espectacular. Más allá de las prontas eliminaciones de Andy Murray, Novak Djokovic, Rafael Nadal, Marin Cilic, David Goffin, Jo Wilfried Tsonga, Thomas Berdych y Juan Martín del Potro, el primer torneo del calendario de la ATP, que premia al ganador con 1000 puntos en el ranking mundial, no ha decepcionado y ha levantado chispazos en la bellas canchas del Valle de Coachella.
El día de ayer, Stanislas Wawrinka se enfrentó a la revelación de Austria, Dominic Thiem, quien complicó en demasía el juego del suizo por las similitudes ente ambos estilos. Esto mismo provocó un juego intenso y lleno de dinamismo, con largos juegos, drives potentes y una seguidilla de golpes que llegó hasta los 32 impactos. Al final, las particularidades dentro del juego de Wawrinka le dieron un extra para imponerse a un Thiem, que pareciera haber tomado el juego del tenista de 31 años como ejemplo, ya que en ocasiones parecía como si Stan estuviera jugando contra un espejo. Los parciales de 6-4 / 4-6 / y 7-6_2, le valieron a Stan colocarse en semifinales de Indian Wells y se medirá ante Pablo Carreño Busta por un lugar en la final.
Los dos cruces del día de hoy definirán a los 2 semifinalistas restantes. El turno vespertino presenciará el duelo entre Roger Federer y Nick Kyrgios y por la noche Jack Sock hará lo propio con Kei NIshikori. El vencedor de dicho duelo se enfrentará a quien resulte con la victoria entre su “Majestad” y la estrella australiana de 21 años. Si todo resulta como la lógica dicta, tendremos una final suiza en Estados Unidos, pero dadas las situaciones del presente torneo, no se pueden descartar las sorpresas, pues han sido el pan de cada uno de los días en Indian Wells.
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ASC
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