Del infierno…a la Liguilla

 

Óscar Beltrán

Orgullo, honor, la carrilla de una semana entera, todo eso estaba en disputa, cuando las Chivas recibían en su estadio al Atlas, el odiado rival en lo deportivo, nada más. De esos partidos en los que están prohibido perder, dicen que se disputan más de tres puntos, y en el inmueble rojiblanco, se cerraba la jornada catorce del Clausura 2016.

Los pupilos de Almeyda llegaban con su racha en la espalda, tal cual Pipila, se cargaba el equipo a la espalda, mientras que del lado de los Zorros la situación era cada vez más compleja hundidos en el fondo de la tabla general, sin muchas posibilidades de llevarse el triunfo.

Con gol de último minuto para las Chivas, el resultado fue favorable para los rojiblancos por 1-0, con anotación del zaguero Jair Pereira, que sentenció las cosas y le dio el cuarto triunfo consecutivo a unas Chivas que tal vez no fueron mejores, pero suman cuatro triunfos al hilo y están en el séptimo lugar de la tabla general.

PRIMER TIEMPO

Chivas desde un principio fue más equipo que la gozaba, tenían el balón y lo trataban de lado a lado, uno y otro trazo; lo único que el aficionado en el estadio compartía, era el abucheo general a Rafael Márquez, cada que lo tocaba la silbatina era mayor.

Fue el local, unas Chivas necesitadas de los tres punto, quienes salieron con la determinación de llevare el triunfo, siempre yendo adelante. Ante unos rojinegros que aguantaban y se perdían en la parte defensiva, sin ganas de atacar. Estaban tirados atrás, es como así el Guadalajara se llevaba el partido, era amplio dominante.

La primera de peligro, sin embargo llegó al minuto 24, el “Aris” Hernández que se mandó un gran primer tiempo, se quitó a un par de enemigos, después tocó para empujarla a un Omar Bravo que ingresó solo y su alma al área, sin embargo su disparo salió justo a las manos del guardameta argentino de los Zorros, Ustari se mandaba la atajada en dos tiempos.  

Los de rojo y blanco seguían siendo más en el campo, iban siempre al frente, el rival no se encontraba en el terreno de jugo, por lo que se los estaban comiendo. Minuto 30, otra vez Edwin Hernández, era el jugador de mayor peligro del Rebaño, otra vez limpió la zona baja y se la dejó a Bravo, sí otra vez el capitán de frente, otra vez mano a mano quedó el capitán rojiblanco que encaró, sacó el disparo y otra vez Ustari aguantó hasta el final y acabó desviando un gol cantado.

El juego se trabó nuevamente y nada más pasó, pues ni uno ni otro realmente fueron determinantes al momento de atacar. Se acababa la primera mitad con empate sin goles.

SEGUNDO TIEMPO

Atlas inició mejor, emparejaron la situación y también comenzaron a tener  las suyas, aunque el encuentro siguiera sin goles y con el balón peleado en el centro del terreno de juego.

Al minuto 67, salió Omar Bravo, se fue entre incógnitas, a la cancha el ya famoso y entusiasta “Chofis”. Justo en ese momento llegó un servicio al área, de cabeza la ganó Bergessio, pero su remate se fue apenas rozando por un costado.

Un minuto más tarde, se io un cambio que nadie se veía venir, salió del campo Márquez y su lugar fue ocupado por Baloy. Por su parte el Rebaño mandó al “Dedos” en lugar del “Chapo”.

Se jugaba el minuto 70, Atlas no sólo emparejó, se veía mejor en el terreno de juego, vino un servicio al área a cargo del “Tata” González, “Ponchito” González la prendió de primera y el esférico terminó por estrellarse en el travesaño, se salvaba el conjunto local, el Atlas daba signos vitales.

Los Zorros tenían para más, se veían en mejor forma y eran más peligrosos. Minuto 82, dentro del área la tomó Bergessio, hizo un quiebre a Salcedo, sacó el disparo angulado, parecía gol, lo cantaban todos, pero a una mano voló el cancerbero Cota y la mandó a saque de esquina cuando parecía que la noche sería para el zorro.

Chivas se compuso al final, intentó ir adelante yde pronto se metieron de lleno. Al minuto 87, “Chofis” se animó de fuera del área y apenas Ustari alcanzó a desviar.

Tiro de esquina, recta final, ya se jugaban dos minutos de agregado, el empate sin goles parecía sería el resultado, pero vino un tiro de esquina, como es costumbre Atlas perdió la marca, Baloy solamente fue un espectador más, cuando Pereira se levantó y remató de cabeza, se abrió el marcador poniendo las cosas 1-0, en el complemento, en el último suspiro. Así Chivas se llevó el triunfo, ante la incongruencia de los atlistas que no sabían que pasaba en el campo.


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