El caso del pleito que se traen Osvaldo Alanís y las Chivas ya tomó puntos decisivos. Según el CEO del equipo, el jugador ya no entra en planes, aunque le queden 6 meses de contrato.
Alanís, defensa central y seleccionado nacional, entró en controversia laboral al pedir un aumento de sueldo al que la directiva le contestó con negativa e incluso dejándolo fuera de la concentración del rebaño en Cancún.
Es verdad que Alanís es buen jugador, constante y rendidor, antes del torneo que recién finalizó. Alguien le tiene que decir que Chivas tuvo uno de los peores torneos que se les recuerde, si no es que es el peor de su historia y por lo tanto no es el mejor momento para pedir un aumento o ponerse en plan de diva.
La directiva ya le puso un “estate quieto” al bajarlo del avión y mandarlo a entrenar a San Rafael con los juveniles y de paso sustituirlo con el joven Juan de Dios Aguayo.
Para colmo de males para el jugador y gracias al “pacto entre caballeros” solo Monterrey o Pachuca podrían sacarlo del hoyo, esto porque son los únicos que pueden negociar fuera del Draft al ser finalistas del torneo de copa.
Parado 6 meses en el año del Mundial, le puede costar hasta la convocatoria al central mexicano
