Por temor a un posible contagio de coronavirus, algunos jugadores de la NBA, han tomado la decisión de no reportarse a sus respectivos equipos en Orlando, Florida, cuya situación afectaría el regreso de la temporada 2020 a finales del mes de julio.
Tal es el caso de Avery Bradley, escolta de Los Lakers de Ángeles decidió quedarse fuera de la acción y no regresar con el club para el final de la serie regular y la postemporada debido a que uno de sus hijos tiene problemas respiratorios.
En la misma situación está Trevor Ariza de los Blazers de Portland, quien se encuentra en un caso de custodia por uno de sus hijos y decidió visitarlo, aprovechando un permiso de un mes de visita que recibió. Esto le impedirá reportarse a su equipo.
Otro jugador que decidió no regresar con su equipo fue Davis Bertans, centro y delantero de los Wizards de Washington.