Con una gran actuación del portero Pekka Rinne, los Nashville Predators ganaron el cuarto juego de la Stanley Cup 4-1 ante los Pittsburgh Penguins y así igualar la serie a dos victorias por equipo.
Rinne finalizó con 23 disparos detenidos, la mayoría de de forma espectacular, y se ha convertido en la figura del equipo de la Conferencia del Oeste, ya que en los dos últimos encuentros solo ha permitido dos goles por parte de la mejor ofensiva de la liga.
Con goles de Calle Jarnkrok, Viktor Arvidsson, Fiip Forsberg, y el novato Frederik Gaudreau, Nashville puso su marca en postemporada como local en 9-1.
La buena noticia para los Penguins es que Sidney Crosby logró su primer gol en la serie y fue el primero en la Stanley Cup desde el 4 de junio de 2009, habían pasado 12 juegos sin que pudiera mandar el puck a las redes. El portero Matt Murray, quien detuvo 22 tiros, perdió dos juegos consecutivos por primera vez en su carrera.
Pittsburgh intenta convertirse en el primer bicampeón de la NHL desde que los Detroit Red Wings lo lograron en 1997 y 1998. Los Penguins han levantado la Stanley Cup en cuatro ocasiones, mientras que los Predators buscan hacerlo por primera ocasión en su historia.
El quinto juego de la serie se jugará el jueves por la noche en Pittsburgh, donde los Pens se llevaron los dos primeros sin mucho problema.
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