Los dirigentes del fútbol surcoreano han enviado una propuesta a sus pares de Corea del Norte, a fin de organizar de manera conjunta el Mundial de Mujeres en 2023.
La federación norcoreana no ha emitido todavía una respuesta a este planteamiento que podría representar un paso significativo hacia la construcción de la paz en la Península de Corea. Técnicamente, ambos países siguen en guerra, dado que el conflicto que libraron de 1950 a 1953 concluyó con un armisticio, no con un tratado de paz.
El presidente de la FIFA Gianni Infantino ha alentado a las dos naciones para que presenten una candidatura conjunta. La decisión de la sede del Mundial en cuestión sería tomada en marzo de 2020 por el consejo rector de la FIFA.
Chung Mong-gyu, presidente de la federación surcoreana de fútbol y miembro del Consejo de la FIFA, busca la candidatura tras obtener el apoyo preliminar de su gobierno.
“Respecto de la posible candidatura conjunta con la Federación de Fútbol de la República Popular Democrática de Corea (Corea del Norte) para la Copa del Mundo de Mujeres de 2023, hemos enviado nuestra propuesta, y estamos esperando recibir su respuesta oficial”, dijo Chung el martes en un comunicado que envió a The Associated Press.
Los dirigentes del fútbol surcoreano suelen comunicarse con sus homólogos del norte mediante la Federación de Fútbol del Este Asiático.
El 15 de marzo, vence el plazo para manifestar ante la FIFA el interés por realizar el Mundial. El registro de candidaturas tendría que ser enviado para el 16 de abril, y los países tendrían hasta el 4 de octubre para presentar los documentos relacionados con su candidatura ante la FIFA, con sede en Zúrich.
Exploran ya candidaturas Australia, Colombia, Japón y Sudáfrica. Por lo tanto, el Mundial de 2023 parece como el más disputado entre naciones interesadas en albergarlo desde que estas competiciones de mujeres comenzaron en 1991.
Asimismo la FIFA ha impuesto las reglas más estrictas para los candidatos a la fecha _emulando buena parte del proceso de puja que debió seguirse el año pasado, cuando se otorgó la sede conjunta del Mundial de hombres de 2026 a Estados Unidos, México y Canadá.
Se evaluarán temas relacionados con derechos humanos, así como reportes de riesgos de todas las naciones interesadas. De igual forma, se inspeccionarán las instalaciones y se emitirán reportes de evaluación.
Ello podría constituirse como un obstáculo para que Corea del Norte sea sede del Mundial, ante preocupaciones relacionadas con abusos a los derechos humanos, detención de disidentes y falta de libertades religiosas y de expresión.
Una candidatura podría ser obstruida también por las sanciones internacionales, encabezadas por Estados Unidos, que restringen el envío de equipamiento deportivo a Corea del Norte.
La semana pasada, una cumbre entre el presidente estadounidense Donald Trump y el líder norcoreano Kim Jong Un terminó en medio de una disputa sobre cuánto debería relajar Washington las sanciones sobre Pyongyang a cambio de pasos para el desarme nuclear.
El presidente surcoreano Moon Jae-in ha impulsado activamente la reconciliación con el norte. Durante el último año, en cumbres conjuntas, las Coreas prometieron reanudar la cooperación económica y buscar conjuntamente la sede de los Juegos Olímpicos de 2032.
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Rob Harris está en Twitter como www.twitter.com/RobHarriswww.facebook.com/RobHarrisReports
