Una de las aficiones más coloridas del futbol mexicano es la de los Pumas de la UNAM, que cada fin de semana se hace presente en los estadios del país para apoyar al equipo.
Sin embargo, La Rebel, como se autodenominó y registró oficialmente ante el Instituto Mexicano de la Propiedad Intelectual desde 2015 por Salvador Reyes Contreras, tiene un oscuro secreto en su interior.
De acuerdo a una investigación realizada por ESPN, se dio a conocer que el grupo de animación de los Pumas es reconocido por el gobierno como una asociación civil desde el 2016 y se encuentra registrada en el IMPI.
Además de esto, recibió apoyo económico cercano a los 200 mil pesos y el Instituto del Desarrollo Social le proporcionó un inmueble para realizar la celebración de su aniversario número 20.
La Banda del Pebetero AC, como se encuentra registrada, presume ser una asociación dedicada a promover la educación, la tecnología y el deporte, razón por la cual recibieron el apoyo económico del gobierno con e que construyeron una escuela de futbol en Cuautepec, Gustavo A. Madero, una de las colonias más peligrosas en la Ciudad de México.
En dicha academia se cobran 400 pesos de mensualidad por tres entrenamientos a la semana, además de los uniformes, incluso se llegó a recibir la visita de Alejandro Pikolín Palacios y del actual presidente del Patronato del club Rodrigo Ares de Parga.
La Banda del Pebetero tiene registrado un domicilio, el cual aparenta estar abandonado y sólo cuenta en su exterior con el logotipo del equipo grabado en el portón del deteriorado edificio.
