El Real Madrid es el mejor a domicilio de la cabeza de la clasificación

Pero el peor equipo de los tres primeros en casa, como demuestra el hecho de que está muy lejos de los números del Atlético de Madrid, y a toda una victoria -en el momento de escribir el artículo- del FC Barcelona, aunque de su inmediato perseguidor, el Sevilla, tan sólo le separa un punto en la clasificación general.
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A continuación repasamos las peripecias del club capitalino para llegar hasta aquí, pero también las dificultades y noticias paralelas que no han afectado tan sólo al Real Madrid.

Buenos números a domicilio

 

Pero no lo suficiente para compensar un desempeño más mediocre en el Bernabéu, a pesar de que la relación de goles a favor frente a los goles en contra es aún mejor en casa, parece que el club blanco obtiene “petróleo” de los tantos en casa ajena y no tanto en la suya propia. A pesar de que ya se ha cruzado el ecuador de la temporada aún queda tiempo suficiente para que el desempeño del club cuando no juega en el Bernabéu se replique en el campo que lleva por nombre el del histórico ejecutivo blanco.

En la Champions League (competición más importante a la que puede aspirar un club europeo, al menos de momento) el club afronta los octavos de final frente al club italiano Atalanta, equipo que a priori tiene todas las de perder en la eliminatoria, pero que en la competición europea ya ha demostrado sus credenciales en la presente temporada, venciendo al todopoderoso Liverpool por 0-2 en Bérgamo, y en la pasada eliminado a todo un Valencia, aunque hay quién podría argumentar que el club blanco se encuentra en un orden de magnitud superior, al menos en lo que al club valenciano se refiere.

En la Copa del Rey el Real Madrid cayó ante el modestísimo Alcoyano en los treintaidosavos de final, sin duda un hito para los alcoyanenses, pero que para el Real Madrid no supone más que una anécdota en una competición que para los grandes clubes no es más que la guinda del pastel de una buena temporada, o un premio de consolación para una temporada mediocre.

Déficits presupuestarios y superliga europea

Pero más allá del aspecto deportivo se deben explorar los acontecimientos que han ocurrido fuera del terreno de juego, ya que afectan y mucho al que debería ser el centro de gravedad de un equipo deportivo, la competición.

Al igual que gran parte del resto de la sociedad, los clubes de fútbol han sido duramente golpeados por los efectos de las restricciones de la pandemia, sobre todo los grandes, cuyos ingresos iban más allá de los derechos de televisión (a pesar de que el Real Madrid consiguió a principios de temporada importantes patrocinios como el firmado con el bróker online easyMarkets), que seguirán percibiendo mientras las competiciones sigan su curso, a pesar de las gradas vacías. Sin ir más lejos, la pasada pretemporada los grandes tuvieron que olvidarse de las muy lucrativas giras internacionales, y equipos como el Bayern de Munich tuvieron que conformarse con realizar streaming de su pretemporada y firmas telemáticas de autógrafos.

Como el propio club madrileño puso cifras al desastre no tenemos más que acudir a ellas (cifras que además ayudan a explicar el renovado interés de los grandes clubes por una superliga europea al estilo de las grandes competiciones estadounidenses), si el presupuesto para la temporada 2019-2020 fue de 822,1 millones de euros para la temporada en curso se esperan unos ingresos de 616,8 millones de euros, ya que por ejemplo, para su emblemático estadio (una de las fuentes de ingresos más importantes y menos conocidas del club blanco) no se ha previsto ningún ingreso, por motivos de sobra conocidos y así con todo ingreso que necesite de una movilidad normal de aficionados y trabajadores del club, como las mentadas giras internacionales o la venta de entradas.

Como ocurre con todas las crisis, de la presente los clubes no saldrán como han entrado, ya que el coronavirus obligará a todos a reinventarse, ¿veremos en un futuro cercano una superliga europea llena de estrellas y colmada de millones de euros y un montón de ligas nacionales menores? Es difícil de predecir, ya que aunque hay grandes fuerzas a favor, la FIFA y las grandes federaciones se han posicionado abiertamente en contra.