La mayor decepción del año

Foto: AP 

La indisciplina en Oakland los dejó fuera de la postemporada una vez más

No hay que esperar a que se termine la temporada regular o ser mago para saber que la decepción más grande del año son los Oakland Raiders.

Antes del inicio de la campaña, el equipo negro y plata era considerado como gran favorito para pelear con los Patriots y Steelers por el título de la Conferencia Americana, después de concluir con marca de 12-4 en 2016. Sin embargo, cuatro meses después está eliminado de la postemporada y es muy probable que termine con marca perdedora.

Obviamente es un fracaso no avanzar a playoffs, pero lo peor es la forma en la que jugaron todo el año. Luego de arrancar con dos triunfos, Oakland se convirtió en un equipo predecible a pesar de su “explosiva” ofensiva que mucho presumían y su defensiva solo confirmó lo que todos sabíamos: no puede detener a sus rivales.

El quarterback Derek Carr solo lanzó seis intercepciones el año pasado y con dos semanas aún por jugar esta campaña ya tiene 10. Hasta el momento es la peor actuación de su carrera en pases de anotación (20) y está ubicado en el lugar 32 de 35 quarterbacks calificados en pases largos.

Juntando las estadísticas de Amari Cooper y Michael Crabtree (1,100 yardas) no les alcanzaría para ubicarse entre los mejores ocho receptores de la liga y ya hay tres que superan las 1,200. Entre ambos tienen 13 touchdowns, mientras que solo DeAndre Hopkins, de los Texans, tiene 12.

Para algunos esta nueva decepción de los Raiders era algo que se veía venir desde hace mucho, ya que despidieron al coordinador ofensivo Bill Musgrave y se quedaron con Todd Downing, quien estaba como entrenador de quarterbacks y prometía mejorar el ataque del equipo.

La gente que estuvo presente durante los campos de entrenamiento notó que los jugadores no estaban concentrados ni entrenando al cien por ciento y se les notaba muy relajados, algunos decían que hasta muy confiados, algo que al parecer no le molestaba al coach Jack Del Río.

En los últimos meses ha sido clara la falta de disciplina en los Raiders, desde el empujón de Marshawn Lynch a un oficial hasta la pelea de Michael Crabtree con Aqib Talib. Tampoco es una sorpresa que sean líderes de la liga en castigos de rudeza innecesaria o faltas personales.

Gracias al mal nivel de la División Oeste de la Conferencia Americana, los Raiders tuvieron la oportunidad de pelear por el primer lugar ante los Chiefs en la Semana 14, pero solo hicieron el ridículo en Arrowhead Stadium y mostraron que no estaban listos para partidos de gran importancia. A la mitad del último cuarto Kansas City tenía una ventaja de 26-0.

Las victorias de Oakland esta temporada han sido ante Titans, Jets, Chiefs, Dolphins, Broncos y Giants. Solo dos de ellos tienen marca ganadora y estuvieron a milímetros de perder en casa ante Kansas. En ocho partidos han anotado 17 puntos o menos, algo que no se esperaba de un equipo que tiene a Carr, Crabtree, Cooper, Cook y Lynch.

Downing debe tener las horas contadas en Oakland, ya que son la decepción más grande del año por el mal funcionamiento de la ofensiva. Jack Del Río tendrá que hacer algo especial para volver a sacar al equipo del gran hoyo negro en el que está.

 

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