Después de los excesos, entre ellos los kilitos de más, que dejan las vacaciones de verano, las personas comienzan a preguntarse ¿Cuál es la forma más rápida para perder peso? Si eres una persona interesada en recuperar su figura o comenzar una vida saludable, lo más recomendable siempre es cuidar la alimentación sin dejar de lado el ejercicio.
El ejercicio se puede realizar dependiendo de los objetivos de cada persona, existen dos tipos de actividades físicas: aeróbicas y las anaeróbicas, cada una cumple el mismo fin (bajar de peso) pero con diferentes funciones, si ambas se combinan el resultado puede ayudar a la perdida de peso más rápida.
Las actividades aeróbicas son aquellas en las que el cuerpo se mantiene en constante movimiento, por ejemplo; correr, nadar, saltar la cuerda, etc. Durante los primeros 15 minutos del entrenamiento tu cuerpo comenzará a activar las reservas energéticas y con ellas las células adiposas (almacenan grasa) que comienzan a deshacerse y se transforman en energía. De esta forma comenzaras a eliminar la grasa y con ella la perdida de peso será más eficaz.
Los ejercicios anaeróbicos son aquellos en los que el cuerpo reacciona de una manera más lenta pero el beneficio se ve reflejado en los músculos, ya que la masa de ellos comienza a trabajar y acelera el metabolismo entre estos ejercicios están el: levantamiento de pesas, maquinas de gimnasio etc. Estos también ayudan a tonificar los músculos y en su caso incrementar la masa muscular.
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A.F.A.
