En Estados Unidos ha crecido la polémica luego que se anunciara la suspensión del entrenador Alberto Salazar. El escándalo surgió luego que se descubrieran casos de dopaje a los atletas, y en el mismo caso se ha relacionado a Mark Parker, CEO de Nike.
El director ejecutivo de la marca deportiva aseguró que la multinacional no participó en dichos casos de dopaje a los atletas. La Agencia de Antidopaje de Estados Unidos (USADA), encontró una serie de pruebas de Alberto Salazar, a quien Parker le envió todo su apoyo.
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En dichas investigaciones se encontraron correos electrónicos en los que se le notificaba al CEO de Nike los métodos de dopaje. Sin embargo, Parker calificó de “altamente engañosas” las pruebas publicadas por la USADA, y afirma que sus atletas fueron víctimas de sabotaje.
“Tener mi nombre y el de Nike ligados a estas falsas caracterizaciones insensatas de la USADA es ofensivo”, comentó Mark Parker, quien asegura Alberto Salazar actuó de “buena fe” y no violó las reglas de dopaje en Estados Unidos.
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