Lonzo Ball fue número 2 del draft y elegido por Lakers de Los Ángeles, uno de los equipos con más envergadura en la NBA. Por tal motivo, se espera que desde su primera temporada comience a ser la figura del equipo.
La irregularidad en la duela y el tener un padre ‘hablador’ (LaVar Ball), quien tambien fuera jugador de baloncesto, han tornado algo desequilibrado su actual paso por la NBA.
Ball puede ir de los sublime, hacer triples-dobles en un juego, a lo aberrante al no llegar a los diez puntos de media por partido, ya que se ha quedado en 8.9. Para un novato regular esto sería aceptable, pero Lonzo disputa alrededor de 33 minutos por partido.
También en donde se le está juzgando es en su poca capacidad de anotar, pues su porcentajes para alguien que quiere ser la próxima estrella de la liga son muy malas. No llega a un 32% de tiros de campo, tiene un 23% en triples y en el tiro libre tiene un 46%.
En pocas palabras, el basquetbolista no tiene fuerza para penetrar abajo del aro y conseguir puntos, y mucho menos es confiable afuera del perímetro.
Lo que sí es verdad es que aún se espera mucho más de este novato, del cual se espera sea el sucesor de LeBron James.
Síguenos en Twitter
JOPM
