Pese a la lesión que lo mantiene lejos de la cancha, Nahuel Guzmán no evitó las polémicas durante el Rayados contra Tigres, ya que utilizó un láser para incomodar a los jugadores de Rayados, entre ellos, el portero Esteban Andrada, lo cual podría costarle casi diez partidos de suspensión.
El Reglamento de Sanciones de la Federación Mexicana de Futbol, en su artículo 18, contempla diferentes castigos para jugadores que falten al Fair Play o incurran en conductas impropias.
De inicio, Nahuel Guzmán se enfrentaría a lo dispuesto por el inciso B, el cual dicta que la Comisión Disciplinaria tendrá la facultad de sancionar a los jugadores por: “Contravenir los principios de la deportividad y Fair Play, a través de acciones y/o burlas hacia los Oficiales de Partido, los Jugadores, los empleados o Directivos de los Clubes Afiliados, las Autoridades de la FMF o al público asistente”.
🚨 Circula video en redes sociales donde Nahuel Guzmán supuestamente habría apuntado desde un palco con un laser la cancha del Estadio BBVA.
— Luis Omar Tapia (@LuisOmarTapia) April 14, 2024
El mismo habría sido dirigido a Esteban Andrada, portero de Rayados de Monterrey.
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Del mismo modo, el portero también faltó a lo señalado en el inciso J, mismo que sanciona por llevar a cabo una conducta impropia.
¿Por qué el castigo de Nahuel Guzmán sería de casi diez partidos?
Es un hecho que Nahuel Guzmán, portero de Tigres, tendrá que pagar su sanción entre el Clausura 2024, al que restan dos partidos de fase regular y lo que avancen los felinos en Liguilla, y el Apertura 2024.
Los incisos B y J del artículo 18 del Reglamento de Sanciones contemplan de uno a tres partidos en cada apartado. A ello habría que sumar lo que señala el artículo 71 del mismo documento sobre el Fair Play, el Juego Limpio y la Integridad Deportiva.
En su inciso B se lee: “Realizar conductas que vayan en detrimento del Fair Play, del deporte, del juego limpio y
del futbol federado en general. Multa de 300 a 4,000 UMAs y/o de 1 a 3 partidos de suspensión”.
Si se acumulan las infracciones, se podría llegar a una ejemplar cantidad de partidos, además de la sanción económica total que acarriaría.
Tampoco se puede descartar que el portero sea castigado por incitar al público con su conducta.