Este domingo no terminó como Red Bull y el piloto mexicano hubieran querido, sin embargo con el quinto lugar, Sergio Pérez se mantiene como segundo en el campeonato de pilotos detrás de su compañero Max Verstappen. Las cosas pudieron ir mejor pero Checo arriesgó desde la primera curva.
El Gran Premio de Miami es el segundo de esta temporada en el que Sergio Pérez no termina en el podium. Solamente en Australia le había sucedido y esta vez se quedó lejos de los líderes. Arrancó desde la cuarta posición, pero en la primera curva intentó ir por dentro para superar a los Ferrari de Carlos Sainz y Charles Leclerc, pero se fue de largo y de paso estuvo cerca de tocar a Verstappen. Luego de esa maniobra, cayó al quinto lugar y no pudo recuperarse.
No tuvieron la configuración óptima del RB20
Al termino de la carrera, Checo dio sus impresiones y comentó que no estuvo del todo cómodo con la configuración de su Red Bull: “Tuve una buena arrancada, Charles me empuja, me meto al espacio, pero no había agarre en la línea sucia y lo vimos con Hamilton ayer. En algún momento casi me llevo a Max, pude sacar el freno pero terminé por perder la posición con Piastri”.
En general, el piloto tapatío cree que no estuvo mal el fin de semana para el equipo, pero el estar la mayor parte de la carrera en el tráfico, desgastó de más sus neumáticos. Al respecto, Checo declaró: “Tardé mucho al final de la carrera en poner el neumático en temperatura. Tuvimos un balance en el auto que no pudimos corregir y corrimos con el diferencial agresivo y nos perjudicó mucho”.
La degradación de las llantas en esta carrera tampoco ayudó mucho y trataron de compensarlo con la estrategia pero no tuvo buen resultado: “Lo intentamos con otro neumático para ir más agresivo, pero degradamos fácil los neumáticos. Mucho que analizar hoy. McLaren fue más fuerte que nosotros y seguro Ferrari, porque iban pegados a Max y la diferencia con ellos era muy grande”.
