Luego de tener que abandonar el Gran Premio de Australia, el piloto holandés de Red Bull, Max Verstappen, expresó su sentir al tener que salir en la vuelta 5 por un problema en los frenos del RB20.
“Es desafortunado lo que pasó hoy, pero lo que hemos visto en los datos, en el momento en el que se apagaron las luces, el freno trasero derecho se quedó enganchado y se bloqueó. Era como conducir con el freno de mano puesto y como consecuencia de ello, la temperatura iba subiendo, hasta que vi que salía humo porque se iba incendiando”, explicó Verstappen. A pesar de no haber sumado puntos, se mantiene como líder del campeonato después de tres carreras y 51 puntos.
El piloto neerlandés de 26 años y triple campeón mundial, continuó: “Eso en su momento te hacía sentir algo confuso, ya que el coche se mostraba extraño en algunas curvas. En la curva tres frené y perdí la parte trasera, luego en la sexta y séptima me pegó un ‘latigazo'”, declaró al final de la carrera, misma que abandonó en la vuelta 5 de 58 programadas al Circuito Albert Park de Melbourne.
Hay trabajo que hacer para el GP de Japón
Verstappen prosiguió: “El equipo va a investigar y veremos si hay explicaciones para lo sucedido, pero hay cosas que no puedes controlar. Ha sido una pena, porque el coche se notaba bien en las vueltas de formación. Pero no puedes controlar esas situaciones, y estas cosas pasan”.
Max Verstappen es el actual campeón mundial, tiene un total de 56 victorias y cien podios en la Fórmula 1, sin embargo no pudo terminar el Gran Premio de Australia a diferencia del año anterior cuando fue el ganador.
“Estoy decepcionado por no haber acabado una carrera que podíamos haber ganado, porque el coche ha ido mejorando a lo largo de todo el fin de semana. Sabíamos que alguna vez llegaría un día así, por lo que tenemos que estar orgullosos de haber logrado nueve victorias seguidas (las siete últimas de 2023 y las dos de esta temporada) y ahora tenemos que concentrarnos en regresar más fuertes en Suzuka“.